lunes, 26 de febrero de 2007

La oveja negra...

Ningún hombre es una isla, es cierto, por naturaleza o costumbre somos seres sociales que nacen ,se desarrollan y crecen en un ambiente en donde se siguen reglas de convivencia, se conforman estándares y se busca pertenecer a un grupo, una ideología culto o cualquier cosa que involucre más gente. Pero cada hombre nace único y con la posibilidad de convertirse en lo que desee, incluso si eso rompe con las reglas del rebaño.
Y cuando uno ingresa a la transgresión de todo solo importa una cosa: lo que uno desea... lo que lo hace feliz... lo que lo hace único.. lo que lo hace ante los ojos de los demás la oveja negra...
Todos tenemos algo que nos hace únicos es un instinto; algo más fuerte que toda conformidad... necesitamos saber que somos una combinación exclusiva de cosas, sentimientos , gustos, tendencias, conflictos, deseos.
Y si, otros nos miran de costado, nos reprochan e incluso tratan de cambiarnos... pero es parte de la vida ellos tambien tienen derecho a sentir atracción o rechazo hacia las cosas... lo diferente no es malo es solo una muestra de lo que se puede lograr si uno no tiene miedo... lo más difícil no es aceptar lo que es diferente; lo más difícil es aceptar que a veces nos da miedo, o envidia, o nos cuesta darle un lugar en un mundo que es tan grande que hay lugar para todos y esta bien porque el ser feliz no es vivir de acuerdo a las reglas impuestas o q se deben es hacer lo que nos hace sentir bien sin joderle la vida a nadie mas que a nosotros mismos... y si alguien quiere mirar u opinar esta en su derecho porque eso sera parte de su espacio... si todos naciéramos para ser iguales vendríamos en cubeteras....

viernes, 9 de febrero de 2007

Los silencios

Algunos silencios pueden decir más que todas las palabras del mundo. Y aunque suene tal vez ilógico en el silencio es donde más nos cuesta escuchar. Porque el silencio es más que la ausencia de cualquier sonido... es lo que no se dice.. lo que no se puede decir o poner en palabras.. lo que queremos gritar al mundo pero se nos hace un nudo en la garganta y no podemos gritar.
Todos guardamos silencio.. buscando paz... en la memoria de alguien.. en una ceremonia.. cuando rezamos.. cuando besamos...cuando tenemos un recuerdo...cuando hacemos el amor... cuando lloramos solos... Pero cuántas cosas queremos decir en esos momentos... cuantos sentimientos se nos agolpan y desearíamos poder romper ese silencio o que el otro lo escuche... pero a veces el otro no escucha no porque no quiera, no porque sea sordo.. sino, que al igual que debe pasarnos a nosotros con los silencios ajenos , no puede oír lo que uno no dice..sólo imaginarlo, solo querer que lo gritemos, solo poder conocer el lenguaje del silencio y descifrar lo que nosotros decimos en el idioma de lo mas profundo...muchas veces si queremos que los demás escuchen nuestros silencio debemos pararnos y sin miedo gritarlo a viva voz.