
Pero no para todos llega al mismo tiempo la necesidad de migrar... las ganas de ver un lugar nuevo o volver a lugares que ya conocimos... muchas veces debemos permanecer mucho tiempo en un mismo punto (o alejarnos muchos años) para poder decidir qué rumbo tomar...
Y aunque nos apremien las ganas de empezar a recorrer senderos nuevos no podemos ir en contra de la armonía del mundo.... Tampoco podemos arrastrar y obligar a otros a que sigan nuestro ritmo o se queden con nosotros porque no queremos movernos.... o incluso apenarnos cuando vemos que alguien más avanza como avalancha haciendo parecer nuestro ritmo similar al de un caracol..... Mucho menos tratar de adelantar o forzar los tiempos... porque eso sería ir en contra de nuestra naturaleza y no nos acercaría más a nuestro destino, tal vez nos alejaría o haría el camino más dificil...(en especial porque nos correría la maldita ansiedad que te acosa como tábano... y en el apuro podríamos perdernos de detalles importantes).
Y aunque el aparente estancamiento en la evolución de nuestra vida nos asuste, nos parezca eterno ( lo cual considero que es un miedo natural, porque cuando uno es joven quiere todo ya y la vida parece tan corta...) igual de alguna u otra manera todo sigue en movimiento y nosotros evolucionando.... aunque no sea al ritmo que desearíamos.... pero todo llega...aunque nosotros sintamos que estamos parados, estáticos en un punto, todo, de a poco se sigue su curso, incluso nosotros mismos hasta sin darnos cuenta... porque aunque sea por inercia o tiempo, o voluntad .... y aunque sea dificil recordarlo cuando sentimos que estamos estancados: eppur nos muovemus....