Living in a rush

Hoy en unos de esos días Murphy donde todo lo que puede salir mal de hecho sale mal.. me encontré frente a un contingente de viejitas en el super. Lo que más me llamó la atención fue cómo la gente grande se toma su tiempo para todo... Yo con 26 años me enojo si tengo q hacer cola en el super, me impaciento si algo tarda más de lo planeado.. voy apurada por al calle cómo si siempre llegara tarde a todos lados.. como si la vida se me terminara hoy! En cambio la getne grande va caminando por la calle más despacio, no usan ni msjs de texto ni e-mail, ellos se sientan y escriben una carta porque es tiempo dedicado a los que quieren. Mi generación usa débito, home banking y rapipago, ellos se levantan temprano y van al banco, cuentan una a una las moneditas para la cajera, usan monedero y como hacía mi abuela ordenan los billetes con la carita para el mismo lado.. nosotros si es plástico mejor. Hablan más despacio, examinan las cosas con más cuidado y las acomodan prolijamente... y uno se impacienta con ellos.. porque no podemos entender por qué con tantas cosas que hay que hacer y tan poco tiempo no se apuran como nosotros... Quizá es porque como han vivido más se dieron cuenta de que la vida se saborea lentamente porque así le sentimos mejor el gusto.. que por más que nos apuremos si es nuestro destino llegar llegamos.. que cuando uno va atolondrado por la vida se choca con los demás y no admira lo que hay a su alrededor.. de que por más de que corramos contra el tiempo los años pasan igual y no es la cantidad sino la calidad.
Que la vida es una sola y si nos apuramos demasiado podemos perdernos lo mejor que nos ofrece...asi que bueno cada vez q vayamos atolondrados y apurados paremos un ratito y miremos alrededor ... capaz que si los imitamos podamos acordarnos adonde vamos y por qué